Nos preocupamos mucho, y con razón, de tener un buen asiento cuando montamos pero, a la vez, nos preocupamos ‘un poco menos’ de lo que permitimos en nuestra relación con ellos pie a tierra.
Cuando hablamos de asiento o posición no sólo nos referimos a la colocación física de nuestro cuerpo encima del caballo, hablamos también de saber cómo actuar, cómo colocarnos para transmitir al caballo lo que queremos que haga.
No debemos olvidar que nuestra posición física y psicológica, tanto pie a tierra como montados, es nuestra única forma de comunicar con nuestro caballo. Sin una posición coherente, la conversación que tengamos con nuestro caballo puede ser un auténtico desastre y para poder hablar del asiento a caballo, antes debemos hablar de la posición física y psicológica que mantenemos pie a tierra.
¿Posición coherente? Si, me refiero a que debemos ser coherentes con las ayudas que le damos y la posición que adoptamos. Lo entenderá mucho mejor y para poder adoptar cierta posición mental y física debemos entender los mensajes que nos transmite nuestro caballo. Es imposible tener una posición mental y física segura cuando nos sentimos inseguros o dudamos. Si nuestra energía es insegura, nuestro cuerpo y lenguaje corporal (inconscientemente) lo transmitirá al caballo y este lo interpretará como una amenaza.
¿Qué hacen los animales cuando se sienten amenazados? ¿Qué pasa con esas reacciones que no entiendes en tu caballo cuando hay un momento de tensión entre vosotros? Pues eso mismo hacen los caballos. No entienden tu energía, tu lenguaje y la transmisión de tus mensajes no es clara. Y el caballo, en consecuencia, hace lo que hace y la tensión, en vez de disiparse, aumenta.
En el curso de Lenguaje Equino hablamos sobre el espacio entre el caballo y el jinete, sobre el espacio entre los caballos cuando están unos con otros, sobre cómo se enseñan entre ellos y sobre cómo podemos utilizar eso a nuestro favor. Te enseño un paso a paso muy muy fácil para que puedas transmitir un mensaje que tu caballo entienda, hablamos sobre los tipos de energía y cómo debemos actuar en función de cada energía…. Entre otras muchas cosas más. Sí, porque en el curso no hablamos sólo de señales, hablamos de muchísimo más.
Ante todo es necesario identificar en qué situación nos encontramos en relación a nuestro caballo. Existen 5 situaciones de las que hablamos en el curso que nos ponen en peligro muchas veces sin saberlo. Son las situaciones que derivan de una mala comunicación entre caballo y jinete.
Una de ellas por ejemplo es: El caballo no tiene claras mis normas relacionadas con mi propio espacio, que es la situación que mostramos en el vídeo de esta publicación. ¿Y por qué no las tiene claras? Porque no se las he sabido explicar…
Claro que en el vídeo, el simple hecho de que se escape el caballo y casi me pase por encima, es suficiente como para entender que hay algo que no está bien explicado porque antes de que se arrancase hubo una sensación por parte de quien estaba al mando que fue ignorada. A eso vamos ahora. A que identifiques las sensaciones ANTES de que ocurran accidentes para que puedas remediarlo a tiempo.
Si no has hecho ya el curso (en el curso hemos hablado de esto en detalle), me gustaría que reflexionases (puedes comentar si quieres) sobre lo que sientes cuando llevas a tu caballo de la mano sobre todo en las situaciones que le provocan alguna tensión como por ejemplo: en un sitio que no conoce, o a un campo de hierba que conoce y le provoca ansiedad para llegar lo antes posible, cuando lo llevamos a la cuadra y dentro de la cuadra está puesta la comida, cuando lo separamos de los demás, etc.
¿Qué opinas sobre la distancia que tu caballo deja entre él y tú y estás de acuerdo con esta distancia?
Antes de responder a si estamos de acuerdo o no, debemos hacer un ejercicio de reflexión. Por experiencia sé que es fácil decir que estamos de acuerdo con la distancia para no entrar en conflicto con un caballo que quizás está pasando los límites. Nos damos cuenta pero no hacemos demasiado caso, porque si decidimos que no nos gusta, quizás tengamos que enfrentarnos al caballo y no siempre sabemos cómo hacerlo o si empeoraremos la situación…¿te identificas?
Si te identificas, ahora es el momento de dejar los líos de lado, porque ahora es el momento en el que queremos saber qué tipo de problemas tenemos y más importante, cuáles son los que no sabemos solucionar. Darnos cuenta de lo que nos resulta difícil es el primer paso para reconocer algunos errores que podemos estar cometiendo 🙂
Si sabes qué distancia llevas con tu caballo, no estás de acuerdo con ella y no tienes claro cómo mejorar, cuéntanos lo que te molesta y cómo sueles actuar para intentar solucionarlo, puede ser que estés cometiendo algún error que no sepas y ahora lo descubras 🙂
Si tienes clara la distancia que tu caballo tiene que llevar en relación a ti a cada momento y estás de acuerdo en cómo van las cosas, eres igual de bienvenido, nos gustaría, no, nos encantaría saber cómo lo haces, cómo lo has aprendido y cómo sueles solventar posibles faltas de respeto en la distancia de tu caballo.
Un truco para ayudarte a reflexionar:
Piensa en cuando vas andando de la mano con tu caballo. ¿Te sientes seguro? ¿Sientes que el caballo te sigue por todas partes a una distancia prudente y va haciendo lo que tú haces?
Si cres que te puedo ayudar en algo, durante este curso on-line te iré guiando y preguntando más cosas que te irán llevando a la clase siguiente, al ejemplo siguiente, a la explicación siguiente, etc. Pincha en la imagen o en este enlace y sigue camino!