- El peligro de enseñar trucos a nuestro caballo sin establecer antes la base de la gestión del espacio entre él y nosotros
- ¿Qué reacción tiene mi caballo? Lo que debemos tener en cuenta cuando compararnos con otros caballos y caballistas
- Mi caballo no me hace demasiado caso
- ¿Estamos seguros de saber transmitir el mensaje a nuestro caballo mientas montamos?
- ¿Cuando y cómo empieza la «doma» de un potro?
- Un caballo al que no controlamos es un peligro ¡¡Y la responsabilidad es nuestra!!
Una de las cosas que más preocupa a los aficionados ecuestres es el trato con los caballos, prueba de ello es la cantidad de correos que recibimos acerca de esos problemas: querencia, caballos que arrollan, su comportamiento a la hora de las comidas y muchos más.
El capítulo 4 del libro habla de la gestión del espacio entre nuestro caballo y nosotros. Si te lo has leído, sabrás de qué va, si no, te adelanto un poquito de lo que se trata:
Debemos entrenar a nuestro caballo para que nos tenga en cuenta en todo momento mientras estemos con él para velar por nuestra integridad física y, no menos importante, por la integridad física del caballo y los que nos rodean.
Vamos a imaginar un caballo que tiene querencia, que nos atropella, que no sabe esperar para recibir la comida, que no se está quieto mientras le ponemos la montura, que no se deja agarrar las manos, que se asusta de todo y más, que se nos lleva de la mano a la mínima que ven algo que les interese más que nosotros, como comida u otros caballos, y se nos escapa a la mínima que un estímulo externo es más fuerte que nuestra presencia. (Dicho así podría ser un potro pero hay muchos caballos que están montados y algunos hasta competiendo y tienen este tipo de problemas…)
¿Logras imaginarlo? ¿Es seguro relacionarse con ese caballo? ¿No es mucho más probable que le pase algo y se dañe (y a nosotros y a otras personas también) en estas situaciones? ¿Ese caballo está seguro de sí mismo o está inestable emocionalmente? Y esto es importante, porque los caballos que no son estables emocionalmente no logran aprender y se vuelve difícil, y costoso trabajar con ellos. Suele ser también una de las razones por las que no logran avanzar de nivel en la disciplina (aunque estén capacitados para ello). A veces (muchas) se vuelven caballos complicados y peligrosos de montar por esta misma razón. Suelen ser caballos que dan problemas con otros caballos y que no transmiten ninguna seguridad a quien los monta o trata. Caballos inestables frecuentemente se vuelven imprevisibles y entran en pánico con frecuencia lesionándose porque resbalan, se caen y chocan contra cosas que en su estado salvaje jamás chocarían.
La estabilidad emocional del caballo depende de la estabilidad mental que le transmite quien lo educa y de todas las demás personas que se relacionan con él y el animal acepta como su líder (o no).
Durante todo el proceso educativo en cualquier disciplina, la educación de la estabilidad emocional debería formar parte del trabajo: Educamos mientras trabajamos. Para trabajar sin educar, sirven las motos. Los caballos no. Y aunque seamos principiantes o trabajemos pocas veces a la semana o tengamos a los caballos como una afición y no una profesión, debemos mentalizarnos de que la educación de base debe estar presente y tenemos que aprender a dar esa educación independientemente del nivel que tengamos en la disciplina. Si competimos, se vuelve una necesidad especial para que el binomio funcione y tenga resultados duraderos en pista.
En la guía hablamos sobre la diferencia que existe entre trabajar con un caballo bien educado y uno mal educado. Pues bien, educar a un caballo significa que lo capacitamos para aprender a respetar una serie de normas de convivencia con nosotros para que podamos tenerlo como animal doméstico de unos 500 kg.
Mientras incentivamos al caballo a aprender a respetar nuestras normas, el control sobre el espacio entre el caballo y nosotros se vuelve esencial.
Un caballo asustadizo guardará una distancia prudente, que habrá que respetar, hasta que su confianza en nosotros permita que nos acerquemos sin que entre en emoción negativa, huya de nosotros, se defienda o entre en pánico y nos haga daño. Un caballo que tiende a ser dominante, tenderá a querer controlar siempre nuestro espacio personal entrando sistemáticamente en él sin pedir permiso y sin tener gran consideración por nuestra integridad física. Un caballo inseguro también entrará en nuestro espacio sin permiso cuando se asuste de otras cosas y no esté pendiente de nosotros y un caballo que sólo se siente seguro con nosotros invadirá nuestro espacio porque se pegará a nosotros como una lapa y seguirá asustándose de lo demás.
Para lograr una gestión adecuada de esa distancia entre nosotros, necesitamos su atención en todo momento, saber controlar nuestras emociones y desde luego, saber de qué tipo de caballo se trata, pero de esto se habla más en el libro e iremos viendo casos en el blog conforme entremos más en este tema.
La atención hacia nosotros se entrena poniendo límites en el espacio que nos separa del caballo. Una vez que el caballo nos acepte en su espacio y sepa respetar el nuestro, la comunicación con el animal se vuelve posible volviendo el trato más seguro. Es fácil de decir y algo más difícil de hacer pero yo he logrado simplificarlo bastante durante los años que llevo entre caballos y puedo simplificarte la vida en este terreno. .
La educación del caballo empieza pie a tierra no solo para muscular al caballo y prepararlo físicamente para una disciplina, como también para que haga de la atención hacia nosotros una costumbre. Qué será más fácil educar una vez estemos montados, ¿un caballo que está acostumbrado a tener en cuenta la presencia e indicaciones de quien lo educa, o uno que está acostumbrado a no tener ese respeto?
Este post te servirá para reflexionar sobre cómo reacciona tu caballo cuando se trata de la gestión del espacio entre tú y él. Puesto que para aprender cosas nuevas, primero debemos encontrar los errores que podemos estar cometiendo, y la única forma de saber qué errores podemos estar cometiendo es observando la reacción de nuestro caballo (y la nuestra) en determinadas situaciones, te animo a compartir tus experiencias, dudas y preguntas que tengas sobre cómo hacer para que el caballo te haga más caso, para ir profundizando sobre su tratamiento y solución.
Pregunta: ¿Cómo evaluarías la reacción de tu caballo cuando le pides algo tan simple como que salga de tu espacio?
¿Quieres entender a tu caballo y saber aplicar su lenguaje a favor de vuestro trabajo como binomio? pincha en la imagen y te enseño cómo hacerlo:
¿Quieres aprender a educar a tu caballo del ramal mediante una serie de ejercicios esenciales mientras disfrutáis trabajando en equipo? La siguiente imagen es para ti. Pincha en ella y verás toda la información:
Hola! es la misma situación para un burro? tengo un burrito de 3 años aprox, antes caminaba y me seguí, ahora él quiere ir todo el tiempo al frente, si yo voy adelante me pasa de largo o me ha intentado morder el brazo por atrás. Lo saco a caminar, pero siempre se echa a correr para donde quiere o cuando lo llevo de vuelta a su corral se las ingenia para darse la vuelta corriendo.
PUes es muy parecido, son un poco más lentos de respuesta. Y con lento no quiero decir lentitud mental, son muy listos, son más lentos por que se resisten más a las peticiones. Pero la educación es muy parecida. Te aconsejo vivamente el curso de «Cómo aplicar el LENGUAJE EQUINO en el día a día», allí encontrarás todos los conceptos fundamentales de la educación y de la comunicación con tu caballo. Te vendrá como un guante ;). Te dejo aquí el enlace: https://equierroreslab.teachable.com/p/el-lenguaje-equino
Buenas noches, quisiera saber si pueden ayudarme con mi yegua.. No me obedece.. no camina cuando la monto.. Antes lo hacía.. Luego estuvo un mes sin que la monte por haberse lastimado una pata y ahora da una vuelta conmigo y queda quieta y no logro que se mueva.. Si la llevo yo caminando me hace caso y me sigue, pero cuando la monto se queda en el lugar.. Qué puede estar pasando? qué puedo hacer para que me haga caso y marche? Gracias!!
HOla Iriel, gracias por el mensaje!!
Cómo llevas el trabajo pie a tierra? Cuando la llevas de la cuerda y le pides que marche hacia un lado u otro y ande a tu alrededor o cambie de mano, responde? Cuando le pides que se pare? Y que ande de nuevo? Cuando en libertad le pides que se vaya cómo lo hace? contrariado? o se marcha sin rechistar? y para venir hacia tí como lo haces? y cuando le pides que venga, viene?
Tienes toda la razón Lluís, no nos merecemos la etiqueta de «homo sapiens»…
Hola Monique,
Estàs feta tota una filòsofa. I és que el mon dels cavalls ens porta més enllà.
Ens canvia la vida, la manera de pensar o de veure les coses. Molt sovint fas paralelismes entre les relació amb el cavalls i amb els humans. I és que en la part més recóndita del nostre cervell tampoc som tant diferents. Uns quants milions d’anys d’evolució ens han portat més lluny, ens hem classificat com a humans i fins i tot ens hem atrevit a posar-nos la etiqueta de ‘homo sapiens’.
Etiqueta que no sé si ens mereixem, si fem una mirada a com està el mon.
Petons,
Lluís